domingo, 15 de agosto de 2010

resumiendo

Tuve que hacerme análisis DOS VECES: para rechazar un laburo primero, a días de empezar a trabajar; para después meterme en otro en el que duré 2 DÍAS y me fui. Y estaban copados eh, buena plata, buenos beneficios. Pero es que mi idea de vida no es vivir para trabajar, sino trabajar para vivir. Y la idea de ir a Capital todos los días y convivir con los hombres topos, me da ganas de llorar. Posta, yo no sé como la gente puede convivir en Microcentro.
Asi que estoy donde empecé, con el negocio propio de siempre, con el bar hoy a la noche y siendo una busca vida, pero perfeccionandome cada vez más.
Mi casa es absolutamente atípica, con horarios atípicos; mi marido también tiene un trabajo con horarios y días no convencionales y me gusta así:
es caos, pero extraña rutina.
Pero hay TIEMPO. Lo desperdiciemos o no, creo que el TIEMPO, es lo más preciado que tenemos.

1 comentario:

Madie dijo...

Me mata que le digas mi maridooo, jaja, lindísimo :) :)